Resurrecta.- Vic Echegoyen

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Reseña Resurrecta.- Vic Echegoyen

Editorial: Edhasa

Año de edición: 2021

ISBN: 9788435063852

Formato: Papel

Sinospsis:

Lisboa, 1755. El día de Todos los Santos amanece soleado y promete una agradable jornada de fiesta. Nada hace presagiar que una serie de terremotos de una intensidad nunca vista hará caer, en apenas instantes, casas, catedrales, iglesias y palacios sobre las cabezas de sus moradores. El tsunami que los sigue, unido a un incendio apocalíptico, convierte la fiesta en tragedia para el rey y su corte, pero también para presidiarios y busconas, damas, monjes, prelados, cirujanos, soldados, marineros e incluso para un pequeño mono tití. 

Relato coral, vibrante y terrorífico a la par que sensorial y humano, Resurrecta nos narra, minuto a minuto, las seis horas que transformaron la historia no sólo de Lisboa, sino de Europa. Vic Echegoyen, con una maestría narrativa difícilmente igualable, nos regala una historia que llega al corazón bajo la apariencia del desorden y el horror: teje un mosaico complejo y sencillo a la vez, en el que se condensan las emociones y reacciones humanas ante la adversidad, pues sus personajes –tantos de ellos inolvidables– mantienen el pulso narrativo a un ritmo endemoniado: desde la responsabilidad del ministro del rey hasta la sunista político; el médico desbordado; el arquitecto que no quiere sobrevivir a su obra; la monja que necesita salir a socorrer; el cortesano calculador o el castrato que canta para las víctimas. Uno a uno, todos ellos serán los puntales de la nueva Lisboa resucitada de sus escombros. (Sinopsis extraída de: Edhasa).

La autora:

Nació en Madrid en 1969, aunque proviene de una familia hispano-húngara de escritores (entre ellos Sándor Márai e Imre Madách), cineastas, músicos y pintores. Estudió Periodismo y comenzó su vida laboral en la agencia EFE, pero luego decidió ser lingüista de profesión (es traductora e intérprete en organizaciones internacionales, y domina el alemán, húngaro, francés, inglés, ruso e italiano) y escritora y pintora por vocación. Vive a caballo entre Hungría, Viena y Bruselas y entre sus escritores preferidos están Pío Baroja, László Passuth o Patrick O'Brian.

Es coautora del Diccionario de regionalismos de la lengua española y le apasiona escribir relatos ambientados en la Edad Media, el Barroco y la Ilustración. El lirio de fuego (Ediciones B, 2016), su primera novela, resultó finalista del IV Premio de Novela Fernando Lara. Su novela La voz y la espada (Edhasa,2020) obtuvo una más que buena acogida por la crítica y ha sido seleccionada para varios premios entre los que destaca el Premio Espartaco de Novela Histórica. En 2020 publica Resurrecta (Edhasa, 2021) de la que ha vendido los derechos a Portugal e Italia, de momento.

En 2022 recibe el Premio Odilo a la mejor autora de novela histórica del 2021, que se otorga durante el Certamen de Novela Histórica de Cartagena en 2022 por su obra Resurrecta. (Biografía extraída de: Edhasa).

Mi reseña:

Hoy os traigo al blog la reseña de una novela que nos traslada a uno de los momentos más trágicos vividos por la ciudad de Lisboa, el terremoto que destruyó la ciudad por completo en 1755, que llegó acompañado de un tsunami. Hoy os cuento mis impresiones sobre Resurrecta, que nos narra, minuto a minuto, el terror sufrido por los lisboetas esa mañana del 1 de noviembre en la que, aparentemente, todo era normal hasta poco antes de las diez de la mañana. Agradezco a Edhasa Editorial el envío de un ejemplar para su lectura y reseña.

 

Lisboa, 1755. Poco antes de las diez de la mañana, la ciudad comenzará a temblar de forma incontrolada. Sus habitantes, que al principio creen que se trata de un pequeño terremoto, en segundos se darán cuenta de que se enfrentan al peor momento de sus vidas cuando toda la ciudad comience a venirse abajo sin control. Como si de un castigo divino se tratase, edificios, montes e iglesias comenzarán a derrumbarse sobre los lisboetas, que no encontrarán lugar seguro donde refugiarse. Pensando que el río y el mar son su única escapatoria, pronto se dan cuenta de su error, cuando de repente una ola gigante se dirija hacia la ciudad y arrase con lo poco que el terremoto había dejado en pie. Arrasada por completo, a Lisboa solo le quedará recomponerse y resurgir desde sus cenizas.

En Resurrecta Vic Echegoyen no nos sumerge solo en una novela histórica, nos sumerge en una crónica minuto a minuto sobre la enorme tragedia que supuso el terremoto de Lisboa de 1755. Esto hace que los lectores podamos meternos de lleno en la angustia que asola a los personajes de la novela, con la peculiaridad de que nos vamos a anticipar a lo que viene, porque también viviremos esos minutos previos al temblor, en los que seremos testigos de sucesos y sensaciones que los personajes pueden percibir pero siendo aún ajenos a lo que van a sufrir en pocos minutos. Creo que es un acierto ese planteamiento que la autora ha hecho de ir minuto a minuto porque la sensación de desasosiego y al mismo tiempo de rapidez que se tiene a lo largo de la lectura hacen que nos encontremos ante una crónica de lo sucedido que nos permite adentrarnos en esa tragedia que arrasó una ciudad y la vida de sus habitantes. Pero además, seremos testigos de cómo esos mismos habitantes tendrán tantas reacciones como la naturaleza humana es capaz de reaccionar, desde aquel que antepondrá el ayudar a los demás y salvar a sus semejantes a su propia seguridad o salvar la memoria histórica que ayude a reconstruir la ciudad, a aquellos que corran sin mirar atrás, e incluso quien aproveche para saquear y expoliar sin remordimientos

 

Escrita bajo un estilo directo, en Resurrecta Vic Echegoyen utiliza la figura de un narrador externo omnisciente que se expresa en tercera persona para proporcionar a los lectores toda la información, objetiva y subjetiva, que afecta a los personajes que aparecen en la novela, dándonos así una visión más global y objetiva de todo lo que acontece. Por supuesto, siguiendo un hilo temporal lineal, minuto a minuto, encontramos algunas analepsis en forma de pensamientos de los personajes que, mientras están sufriendo las consecuencias del terremoto, recuerdan momentos de sus vidas, de lo que les ha llevado a la ciudad o a estar ahí en ese preciso momento. Con unas descripciones precisas y certeras, nos adentramos en el Teatro de la Ópera momentos antes del terremoto, mientras los actores ensayan el estreno que se producirá esa noche, ajenos a lo que está a punto de ocurrir; entraremos en la barca de un pescador que nota como el río se comporta de forma extraña o nos adentraremos las entrañas del Palacio Real. A estas descripciones se unen unos diálogos perfectamente encajados, donde vamos descubriendo a los personajes, cuál es su naturaleza y cómo se van desarrollando a lo largo de la novela. Todo esto permite que encontremos una gran visibilidad a lo largo de la novela.

 

En cuanto a los personajes, Resurrecta es una novela coral, en la que la auténtica protagonista es la propia ciudad, que como si tuviera vida propia, es la que va marcando todos los acontecimientos. Después, serán los personajes los que nos irán demostrando cómo, ante una misma situación, las personas nos comportamos de la mejor y de la peor manera posible. Conoceremos monjas que abandonan la supuesta seguridad del convento para aventurarse en las calles de la ciudad y ayudar a quienes en ese momento creen son los más necesitados; prostitutas que ayudarán en los caminos sin reparar en el origen de quien requiera la ayuda, familias que permanecerán unidas más allá de lo que creían posible o la lealtad de un animal que superará todos los límites; pero también conoceremos la otra cara de la moneda, esa cara que hace que seamos capaces de lo peor, de aprovechar la desgracia ajena para poner la bota en el cuello del que se ahoga y terminar de hundirlo, ladrones y asesinos que pretenderán aprovechar la situación para enriquecerse.

Sin duda, Vic Echegoyen nos brinda en Resurrecta una magnífica obra que nos permite adentrarnos en una de las mayores tragedias vividas por una ciudad, que fue capaz de resurgir de sus cenizas todavía más bella y más fuerte.