Reseña Las batallas silenciadas.- Nieves Muñoz
Editorial: Edhasa Editorial
Año de edición: 2019
ISBN: 9788435063357
Formato: Papel
Sinopsis:
SE PERDIERON MUCHAS VIDAS. PERO TAMBIÉN MUCHAS ALMAS QUEDARON EN SUSPENSE...
Verdun, 1916. Cuando estalla la Gran Guerra, Irene Curie toma una decisión: la de estar lo más cerca posible del frente. Convencida de que ayudará a salvar muchas vidas, gastará hasta su último aliento en enseñar radiología a los cirujanos en los hospitales de campaña mediante aparatos portátiles ideados por ella y su madre, Marie Curie.
Su estancia en el hospital de Barleduc se convertirá en una lucha para ganarse el respeto de los curtidos militares y de sus compañeras... hasta que estalla la tormenta. Cuando los alemanes bombardean Verdun, comienza una carrera contrarreloj para arrancar de la muerte la mayor cantidad de vidas posible. Junto con una enfermera, Berthe, y una voluntaria, Shirley, se enfrentará al infierno que supuso la batalla más cruenta y larga de la guerra. Y no sólo lucharán por su propia supervivencia. El cielo y la tierra arden... y ellas están en el medio de la batalla.
Con una prosa vibrante y enérgica, llena además de sensibilidad y feminidad. Nieves Muñoz nos narra la batalla de Verdun como nunca antes la habíamos visto; ante nuestros ojos aparecen las vidas de todos aquellos que participaron, de una forma u otra: desde las trincheras, en los pueblos, en el aire, en los hospitales de campaña... Porque como en toda guerra, hubo vencedores y vencidos, pero todos tuvieron alma, y en esta su primera novela Nieves Muñoz nos abre la suya y la de sus personajes para darnos un bien eterno: la esperanza. (Sinopsis extraída de: Edhasa Editorial).
La autora:
Nació en Valladolid en 1976. Vinculada siempre a las letras, bien como escritora de historias o como lectora, eligió sin embargo un camino diferente para su formación: la enfermería.
Para ella, escribir es una forma de vida. Tras formarse en técnicas literarias, ha colaborado en varias antologías de relatos, como articulista para blogs de narrativa y en la revista literaria El taller de la factoría. Ahora, con Las batallas silenciadas, al fin se ha atrevido a dar el paso y nos ofrece una maravillosa novela histórica con la que ha conseguido aunar sus dos grandes pasiones. (Biografía extraída de: Edhasa Editorial).
Mi reseña:
Hoy os hablo en el blog de
una novela que acabé hace unos días y que me ha gustado muchísimo, una historia
que se encarga de poner en valor el papel que las mujeres jugaron durante la
Primera Guerra Mundial. Hoy os hablo de mis impresiones sobre Las batallas silenciadas de Nieves
Muñoz, que nos traslada hasta 1916, momento en el que se están librando las
batallas más cruentas de la guerra en el frente francés, y también cuando las
mujeres deben dar un paso adelante para hacerse cargo de diversas situaciones
ante la falta de los hombres que se encuentran luchando. Quiero agradecer a Edhasa
Editorial el envío de un ejemplar para su lectura y reseña.
Iréne Curie
Las
batallas silenciadas nos traslada hasta 1916, momento en el que
se están librando las batallas más cruentas que se han visto desde que estalló
la guerra en 1914. Iréne Curie es la encargada de formar a los médicos del
hospital de Barleduc, cerca del frente de batalla de Verdún, en el uso del petit curie, un equipo radiológico portátil
inventado por su madre Marie, y cuyo cometido es permitir hacer radiografías a
los heridos antes de ser intervenidos. Además, Iréne también llega para prestar
servicios como enfermera, lo que propiciará que conozca a Berthe y Shirley, dos
jóvenes con las que vivirá los acontecimientos que cambiarán la vida de todas
ellas para siempre.
Petit Curie
Como os he comentado al
principio de la reseña, Las batallas
silenciadas me ha parecido una gran novela. Los que os pasáis a menudo por
el blog sabéis que soy una gran aficionada a la novela histórica, y que los libros
ambientados en ambas guerras me apasionan, así que en cuanto me surgió la
posibilidad de meterme de lleno en una historia que me trasportaba a plena
Primera Guerra Mundial, y con un grupo de mujeres como protagonistas, no lo
dudé. Nieves Muñoz nos regala una novela coral, con unas protagonistas que nos
hacen sentir muchas cosas, rabia, tristeza, empatía, solidaridad… y unos
hombres que se encuentran en el frente y que también nos van conquistando al ir
mostrando sus miedos, el terror que para ellos representaba el tener cada vez
una mayor certeza de que jamás volverían a su hogar, que nunca tendrían la
oportunidad de escuchar la voz de sus seres queridos ni de sentir los abrazos
que tanta falta les hacen en las frías trincheras. El horror de una guerra que
destrozó el mundo tal y como se conocía, que se llevó por delante toda una
generación de hombres, y que hizo que las mujeres debieran dar un paso al
frente para evitar que todo terminara por hundirse, aunque nuestro papel jamás
fuera reconocido.
Iréne y Marie Curie
Escrito bajo un estilo
directo, en Las batallas silenciadas,
Nieves Muñoz utiliza la figura de un narrador externo omnisciente que,
expresándose en tercera persona, será el encargado de transmitir a los lectores
toda la información que afecta a los personajes que aparecen en la novela,
tanto subjetiva como objetiva. La novela comienza in extrema res, por el final,
con un suceso trágico que tiene lugar años después de la Primera Guerra
Mundial, escenario principal de la novela, y que será el detonante de que todo
lo que ocurrió en 1916 vuelva a la memoria de Iréne Curie, momento en el que la
hija de Marie Curie, se traslada a Barleduc para formar al personal médico del
hospital en el uso del petit curie
(los rayos x portátiles), que serán fundamentales en la cura de los heridos en
el frente, y además ejercer como enfermera en ese mismo hospital. A partir de
ahí, la novela se desarrolla siguiendo un hilo temporal lineal, aunque encontramos
analepsis o flashbacks que nos van
proporcionando información importante del pasado de los personajes. Con unas
grandes descripciones que nos permiten situarnos en cada uno de los escenarios
en los que transcurren las acciones, los lectores tenemos la sensación de ir
recorriendo los lúgubres pasillos del hospital donde los lamentos de los
heridos se quedan clavados en los oídos, o sentimos cómo tiemblan las
trincheras cuando caen cerca las bombas tras los ataques aéreos. A esto se unen
unos diálogos muy bien trabajados por parte de la autora, lo que crea unas
escenas realmente vívidas y llenas de elementos visibles que nos hacen vivir lo
que estamos leyendo.
Trinchera en Verdún
Marie Curie en el frente
En cuanto a los personajes,
aunque los ejes principales de Las
batallas silenciadas sean los personajes femeninos, sería injusto dejar de
lado a los masculinos, a los que poco a poco vamos conociendo, pues aunque al
principio se nos representan a través de la correspondencia que mantienen con
Berthe o con Claudine, después seremos testigos de cómo el miedo a no volver a
casa les va atenazando, el ver que el enemigo les va cercando. Y volviendo a
las protagonistas femeninas, empezamos conociendo a Iréne Curie, la hija de
Marie Curie, y que ha heredado la pasión por la ciencia de su madre. Iréne
conoce en Barleduc a Berthe, la jefa de enfermeras del hospital, una mujer
entregada a su trabajo pero con un carácter difícil que no le pondrá las cosas
fáciles a la joven Curie; a ellas se unirá una voluntaria inglesa llamada
Shirley y entre las tres formarán un grupo que poco a poco se irá convirtiendo
en inseparable, incluso cuando decidan que su ayuda, donde es de verdad
necesaria es en el frente. Personalmente he de deciros que el personaje que me
ha terminado conquistando ha sido el de Shirley, ya que me ha parecido que la
transformación que sufre a lo largo de la novela es realmente bueno.
Llegados a este punto, no me
queda más que recomendaros la lectura de Las
batallas silenciadas, creo que con esta novela Nieves Muñoz no solo nos acerca
al frente de batalla de una guerra librada por los hombres, también nos habla
de esa guerra, silenciosa, librada por las mujeres, que se encargaron de que,
al acabar la barbarie, hubiera un hogar al que volver.
Formato: Papel
Sinopsis:
Verdun, 1916. Cuando estalla la Gran Guerra, Irene Curie toma una decisión: la de estar lo más cerca posible del frente. Convencida de que ayudará a salvar muchas vidas, gastará hasta su último aliento en enseñar radiología a los cirujanos en los hospitales de campaña mediante aparatos portátiles ideados por ella y su madre, Marie Curie.
Su estancia en el hospital de Barleduc se convertirá en una lucha para ganarse el respeto de los curtidos militares y de sus compañeras... hasta que estalla la tormenta. Cuando los alemanes bombardean Verdun, comienza una carrera contrarreloj para arrancar de la muerte la mayor cantidad de vidas posible. Junto con una enfermera, Berthe, y una voluntaria, Shirley, se enfrentará al infierno que supuso la batalla más cruenta y larga de la guerra. Y no sólo lucharán por su propia supervivencia. El cielo y la tierra arden... y ellas están en el medio de la batalla.
Con una prosa vibrante y enérgica, llena además de sensibilidad y feminidad. Nieves Muñoz nos narra la batalla de Verdun como nunca antes la habíamos visto; ante nuestros ojos aparecen las vidas de todos aquellos que participaron, de una forma u otra: desde las trincheras, en los pueblos, en el aire, en los hospitales de campaña... Porque como en toda guerra, hubo vencedores y vencidos, pero todos tuvieron alma, y en esta su primera novela Nieves Muñoz nos abre la suya y la de sus personajes para darnos un bien eterno: la esperanza. (Sinopsis extraída de: Edhasa Editorial).
La autora:
Nació en Valladolid en 1976. Vinculada siempre a las letras, bien como escritora de historias o como lectora, eligió sin embargo un camino diferente para su formación: la enfermería.
Para ella, escribir es una forma de vida. Tras formarse en técnicas literarias, ha colaborado en varias antologías de relatos, como articulista para blogs de narrativa y en la revista literaria El taller de la factoría. Ahora, con Las batallas silenciadas, al fin se ha atrevido a dar el paso y nos ofrece una maravillosa novela histórica con la que ha conseguido aunar sus dos grandes pasiones. (Biografía extraída de: Edhasa Editorial).
Mi reseña:
Hoy os hablo en el blog de
una novela que acabé hace unos días y que me ha gustado muchísimo, una historia
que se encarga de poner en valor el papel que las mujeres jugaron durante la
Primera Guerra Mundial. Hoy os hablo de mis impresiones sobre Las batallas silenciadas de Nieves
Muñoz, que nos traslada hasta 1916, momento en el que se están librando las
batallas más cruentas de la guerra en el frente francés, y también cuando las
mujeres deben dar un paso adelante para hacerse cargo de diversas situaciones
ante la falta de los hombres que se encuentran luchando. Quiero agradecer a Edhasa
Editorial el envío de un ejemplar para su lectura y reseña.
Iréne Curie |
Las
batallas silenciadas nos traslada hasta 1916, momento en el que
se están librando las batallas más cruentas que se han visto desde que estalló
la guerra en 1914. Iréne Curie es la encargada de formar a los médicos del
hospital de Barleduc, cerca del frente de batalla de Verdún, en el uso del petit curie, un equipo radiológico portátil
inventado por su madre Marie, y cuyo cometido es permitir hacer radiografías a
los heridos antes de ser intervenidos. Además, Iréne también llega para prestar
servicios como enfermera, lo que propiciará que conozca a Berthe y Shirley, dos
jóvenes con las que vivirá los acontecimientos que cambiarán la vida de todas
ellas para siempre.
Petit Curie |
Como os he comentado al
principio de la reseña, Las batallas
silenciadas me ha parecido una gran novela. Los que os pasáis a menudo por
el blog sabéis que soy una gran aficionada a la novela histórica, y que los libros
ambientados en ambas guerras me apasionan, así que en cuanto me surgió la
posibilidad de meterme de lleno en una historia que me trasportaba a plena
Primera Guerra Mundial, y con un grupo de mujeres como protagonistas, no lo
dudé. Nieves Muñoz nos regala una novela coral, con unas protagonistas que nos
hacen sentir muchas cosas, rabia, tristeza, empatía, solidaridad… y unos
hombres que se encuentran en el frente y que también nos van conquistando al ir
mostrando sus miedos, el terror que para ellos representaba el tener cada vez
una mayor certeza de que jamás volverían a su hogar, que nunca tendrían la
oportunidad de escuchar la voz de sus seres queridos ni de sentir los abrazos
que tanta falta les hacen en las frías trincheras. El horror de una guerra que
destrozó el mundo tal y como se conocía, que se llevó por delante toda una
generación de hombres, y que hizo que las mujeres debieran dar un paso al
frente para evitar que todo terminara por hundirse, aunque nuestro papel jamás
fuera reconocido.
Iréne y Marie Curie |
Escrito bajo un estilo
directo, en Las batallas silenciadas,
Nieves Muñoz utiliza la figura de un narrador externo omnisciente que,
expresándose en tercera persona, será el encargado de transmitir a los lectores
toda la información que afecta a los personajes que aparecen en la novela,
tanto subjetiva como objetiva. La novela comienza in extrema res, por el final,
con un suceso trágico que tiene lugar años después de la Primera Guerra
Mundial, escenario principal de la novela, y que será el detonante de que todo
lo que ocurrió en 1916 vuelva a la memoria de Iréne Curie, momento en el que la
hija de Marie Curie, se traslada a Barleduc para formar al personal médico del
hospital en el uso del petit curie
(los rayos x portátiles), que serán fundamentales en la cura de los heridos en
el frente, y además ejercer como enfermera en ese mismo hospital. A partir de
ahí, la novela se desarrolla siguiendo un hilo temporal lineal, aunque encontramos
analepsis o flashbacks que nos van
proporcionando información importante del pasado de los personajes. Con unas
grandes descripciones que nos permiten situarnos en cada uno de los escenarios
en los que transcurren las acciones, los lectores tenemos la sensación de ir
recorriendo los lúgubres pasillos del hospital donde los lamentos de los
heridos se quedan clavados en los oídos, o sentimos cómo tiemblan las
trincheras cuando caen cerca las bombas tras los ataques aéreos. A esto se unen
unos diálogos muy bien trabajados por parte de la autora, lo que crea unas
escenas realmente vívidas y llenas de elementos visibles que nos hacen vivir lo
que estamos leyendo.
Trinchera en Verdún |
Marie Curie en el frente |
En cuanto a los personajes,
aunque los ejes principales de Las
batallas silenciadas sean los personajes femeninos, sería injusto dejar de
lado a los masculinos, a los que poco a poco vamos conociendo, pues aunque al
principio se nos representan a través de la correspondencia que mantienen con
Berthe o con Claudine, después seremos testigos de cómo el miedo a no volver a
casa les va atenazando, el ver que el enemigo les va cercando. Y volviendo a
las protagonistas femeninas, empezamos conociendo a Iréne Curie, la hija de
Marie Curie, y que ha heredado la pasión por la ciencia de su madre. Iréne
conoce en Barleduc a Berthe, la jefa de enfermeras del hospital, una mujer
entregada a su trabajo pero con un carácter difícil que no le pondrá las cosas
fáciles a la joven Curie; a ellas se unirá una voluntaria inglesa llamada
Shirley y entre las tres formarán un grupo que poco a poco se irá convirtiendo
en inseparable, incluso cuando decidan que su ayuda, donde es de verdad
necesaria es en el frente. Personalmente he de deciros que el personaje que me
ha terminado conquistando ha sido el de Shirley, ya que me ha parecido que la
transformación que sufre a lo largo de la novela es realmente bueno.
Llegados a este punto, no me
queda más que recomendaros la lectura de Las
batallas silenciadas, creo que con esta novela Nieves Muñoz no solo nos acerca
al frente de batalla de una guerra librada por los hombres, también nos habla
de esa guerra, silenciosa, librada por las mujeres, que se encargaron de que,
al acabar la barbarie, hubiera un hogar al que volver.