Reseña La estación de las flores en llamas (Trilogía del fuego I).- Sarah Lark
Editorial: Ediciones B
Año de edición: 2015ISBN: 978-84-84-666-5700-6
Formato: Papel
Sinopsis:
La edición se viste de lujo para el nuevo comienzo de Sarah Lark: La trilogía del fuego, su mejor obra según los propios lectores. Sarah Lark, donde viven las emociones. «Si me preguntas qué es lo más importante del mundo, esta sería mi respuesta: los seres humanos, los seres humanos, los seres humanos.» Sarah Lark. Mecklemburgo, 1837: el sueño de una vida mejor convence a los familiares de Ida de emigrar a Nueva Zelanda. Pero cuando el barco Sankt Pauli llega por fin a la Isla Sur, a todo su pasaje le espera una sorpresa desagradable. ¿Así es realmente la tierra prometida? Pronto el destino de Ida toma un giro tan inesperado como el de su amor secreto hacia Karl. Y por algún motivo, en esa tierra Ida solo encuentra amistad y protección en la exótica y singular Cat, una chica criada entre maoríes… Hasta que llega la noche de la gran inundación. Sarah Lark, la aclamada autora de En el país de la nube blanca, vuelve con su mejor saga familiar ambientada en Nueva Zelanda. Una epopeya tan emotiva como fascinante que transcurre en las antípodas, por la escritora que ya ha seducido a más de ocho millones de lectores en todo el mundo. La Trilogía del Fuego está considerada la mejor obra de Sarah Lark, autora con más de ocho millones de lectores en todo el mundo, de los cuales un millón y medio en castellano. (Sinopsis extraída de: Ediciones B).
La autora:
Sarah Lark trabajó durante muchos años como guía turística. Pronto descubrió su fascinación por Nueva Zelanda, cuyos paisajes asombrosos han ejercido desde siempre una atracción casi mágica sobre ella. Sarah Lark es el seudónimo de una exitosa autora alemana que en la actualidad vive en España. Con "En el país de la nube blanca", considerado el debut más exitoso de los últimos años en Alemania, sorprendió a crítica y lectores. (Biografía extraída de: Ediciones B).
Mi reseña:
Sinopsis:
La edición se viste de lujo para el nuevo comienzo de Sarah Lark: La trilogía del fuego, su mejor obra según los propios lectores. Sarah Lark, donde viven las emociones. «Si me preguntas qué es lo más importante del mundo, esta sería mi respuesta: los seres humanos, los seres humanos, los seres humanos.» Sarah Lark. Mecklemburgo, 1837: el sueño de una vida mejor convence a los familiares de Ida de emigrar a Nueva Zelanda. Pero cuando el barco Sankt Pauli llega por fin a la Isla Sur, a todo su pasaje le espera una sorpresa desagradable. ¿Así es realmente la tierra prometida? Pronto el destino de Ida toma un giro tan inesperado como el de su amor secreto hacia Karl. Y por algún motivo, en esa tierra Ida solo encuentra amistad y protección en la exótica y singular Cat, una chica criada entre maoríes… Hasta que llega la noche de la gran inundación. Sarah Lark, la aclamada autora de En el país de la nube blanca, vuelve con su mejor saga familiar ambientada en Nueva Zelanda. Una epopeya tan emotiva como fascinante que transcurre en las antípodas, por la escritora que ya ha seducido a más de ocho millones de lectores en todo el mundo. La Trilogía del Fuego está considerada la mejor obra de Sarah Lark, autora con más de ocho millones de lectores en todo el mundo, de los cuales un millón y medio en castellano. (Sinopsis extraída de: Ediciones B).
La autora:
Sarah Lark trabajó durante muchos años como guía turística. Pronto descubrió su fascinación por Nueva Zelanda, cuyos paisajes asombrosos han ejercido desde siempre una atracción casi mágica sobre ella. Sarah Lark es el seudónimo de una exitosa autora alemana que en la actualidad vive en España. Con "En el país de la nube blanca", considerado el debut más exitoso de los últimos años en Alemania, sorprendió a crítica y lectores. (Biografía extraída de: Ediciones B).
Mi reseña:
La reseña de esta semana es
para la última novela publicada por Sarah
Lark y que inaugura su nueva trilogía (La Trilogía del Fuego); se trata de La estación de las flores en llamas,
una novela que he podido leer gracias a
la cortesía de Ediciones B que me
facilitó un ejemplar y que he disfrutado
mucho.
Nueva Zelanda |
En 1837, la vida de Ida y su familia da un vuelco
cuando deciden abandonar su Mecklemburgo natal para perseguir el sueño de una
existencia mejor emigrando a Nueva Zelanda. Sin embargo, las esperanzas puestas
en este viaje pronto se verán truncadas pues la vida en la Isla Sur no será como ellos esperan. Con unas tierras
al lado de un río que amenaza constantemente con desbordarse, Ida no tardará en darse en cuenta de que su
única salida es resignarse y aceptar que esa será su nueva vida y que debe
renunciar a su amor secreto por el que ha sido su amigo de la infancia Karl. Sin
embargo, será Cat, una joven criada
entre maoríes quien hará que, poco a
poco, Ida se dé cuenta de que la resignación no es su única opción en un
país que le ofrece mucho más de lo que ella imagina.
La
estación de las flores en llamas, primer título de la nueva
trilogía de Sarah Lark, ha conseguido que
me enganche, otra vez, a un libro de esta autora; la historia en la que nos
sumerge nos vuelve a hacer viajar hasta las exóticas tierras de Nueva Zelanda,
aunque en esta ocasión y a diferencia de la Trilogía de la nube blanca (que es
la única que he leído hasta la fecha, y cuyas reseñas encontraréis en el blog
con la etiqueta Sarah
Lark), los comienzos para los
protagonistas no serán nada sencillos. Desde el principio, los lectores
sentiremos simpatía y cariño por Ida y Karl, los dos jóvenes alemanes que se ven
obligados, por las circunstancias que les rodean, a abandonar su ciudad natal
para emigrar a un país desconocido donde la vida les promete mayores
oportunidades. La estación de las flores
en llamas nos va a meter de lleno en la
historia de una saga familiar donde el amor, la traición y la superación están
presentes desde el principio hasta el final.
Llanuras de Canterbury |
Escrita bajo un estilo directo que Sarah Lark acompaña de
una prosa cuidada y adecuada a la época en la que se desarrolla la historia
de la novela, pero sin caer en un lenguaje recargado, en La estación de las flores en llamas encontramos la figura de un narrador
omnisciente que se expresa en tercera persona y que va a ser el que nos
hará conocer todo aquello que acontece en la historia y todo lo que afecta a
los personajes, tanto en el plano objetivo como en el plano subjetivo o
emocional, pues los lectores vamos a conocer todo lo que los protagonistas
piensan o sientes a través de esta figura narrativa. La novela se encuentra dividida en nueve partes, que vienen
definidas por el margen de tiempo en el que se desarrollan, ya que el hilo temporal en el que está escrito es
lineal, sin analepsis o flashbacks.
Con unas maravillosas descripciones
que consiguen transportarnos a cada uno de los escenarios en los que se
desarrollan las escenas, están se
completan con unos diálogos bien resueltos por parte de la autora. Leyendo La estación de las flores en llamas
tienes la sensación de poder viajar hasta la Isla Sur de Nueva Zelanda, de
poder ver esas interminables llanuras de Canterbury o de oír las hakas de las tribus maoríes. Con unas
tramas que se van entrelazando entre sí, el
único “pero” que le puedo poner a esta novela es que, en mi opinión, las tramas
que protagonizan Karl y, Chris y Jane se
“pierden” durante demasiado tiempo, para dar todo el peso a la que protagonizan
Ida y Cat, retomándose las anteriores pasada la mitad de la novela.
Kiwi (Ave oriunda de Nueva Zelanda) |
En cuanto los personajes, como ya ocurre en
anteriores novelas de Sarah Lark, se divide el protagonismo entre dos mujeres,
Cat e Ida, ambas con orígenes muy
diferentes y que debido a las circunstancias que les han tocado vivir, se
unirán y su alianza las hará más fuerte.
Aunque son completamente distintas, se complementan. Cat es una mujer
fuerte, con una infancia dura que ha tenido que luchar contra su propio futuro;
criada entre maoríes no consiente que ningún hombre la domine. Por otra parte,
Ida ha recibido una dura educación religiosa y todo en ella es resignación,
hasta que conoce a Cat, cambiando poco a poco su visión del mundo. En La estación de las flores en llamas
volvemos a encontrar a dos mujeres fuertes, aunque cada una lo sea a su
manera, que deben luchar en un mundo hecho a la medida de los hombres y en el
cual la voz de las mujeres no se escucha nunca. También, como en anteriores
novelas, vemos representada a la figura masculina fuerte frente a otra malvada
pero en ocasiones pusilánime. Personalmente,
creo que hay que destacar el personaje de Jane Beit, una mujer de buena
posición que no se resigna al lugar que la sociedad le tiene preparado y decide
intervenir de forma activa, primero en los negocios de su padre y después en
los de su esposo. Cabe destacar que en esta novela, los maoríes tienen un mayor peso en la historia, podemos conocerles
un poco más y su interactuación con los pakea
aumenta. En líneas generales, vamos a encontrar que todos los personajes de La estación de las flores en llamas están bien
perfilados y dibujados dentro de las tramas, cumpliendo a la perfección el
rol que les ha sido asignado.
La
estación de las flores en llamas es una novela landscape que hará las delicias de todos aquellos
que ya hayáis tenido la ocasión de estrenaros con las obras de Sarah Lark y seáis aficionados a ellas
o lo seáis al propio género. Pero en caso de que no hayáis tenido la
oportunidad de leer algo de este tipo, sin duda, este primer libro de La trilogía
del fuego será un debut estupendo en el género.
Flor del árbol rata |
Pese a que me gustan las sagas familiares nunca me ha llamado esta autora, tal vez sea hora de darle una oportunidad.
ResponderEliminarSi te gustan las sagas familiares, creo que Sarah Lark no te defraudará
EliminarUn saludo!