Reseña La huella del mal.- Manuel Ríos San Martín
Editorial: Editorial Planeta
Año de edición: 2019
ISBN: 978-84-08-20691-0
Formato: Papel
Sinopsis:
Durante una visita escolar a la excavación arqueológica de Atapuerca, un chico de catorce años descubre que una de las reproducciones humanas que imitan los enterramientos de los homínidos de hace miles de años es, en realidad, el cuerpo de una chica muerta. La joven parece haber sido colocada con una simbología ritual, y todas las pistas apuntan a un macabro homicidio similar al ocurrido seis años atrás en otro yacimiento en Asturias.
En el pueblo se desata la inquietud. Demasiados detalles recuerdan el caso anterior, por lo que el juez piensa en reunir de nuevo a los policías que se hicieron cargo entonces: Silvia Guzmán, inspectora de la UDEV, y Daniel Velarde, un expolicía dedicado ahora a la seguridad privada. Sin embargo, nadie sabe que en el pasado ambos vivieron una relación sentimental que acabó de manera abrupta y que tuvo mucho que ver en la truncada resolución del caso. Ahora, Silvia y Daniel tendrán que aprender a colaborar y aclarar sus sentimientos para descubrir al asesino del yacimiento y cerrar aquella herida abierta en su pasado. (Sinopsis extraída de: Planeta de Libros).
El autor:
Manuel Ríos San Martín (1965) es licenciado en Ciencias de la Información y ha trabajado en importantes productoras de televisión como Globomedia, BocaBoca y Diagonal, en las que ha ejercido de productor ejecutivo, director o guionista de diversas series y miniseries de televisión. Ha participado, entre otras, en Médico de familia, Menudo es mi padre, Compañeros, Mis adorables vecinos, Soy el solitario, Rescatando a Sara o Sin identidad. Ha coordinado y coescrito el libro El guion para series de televisión y es autor de la novela Círculos.
Actualmente trabaja con la productora BTF, para la que está desarrollando un biopic sobre el cantante Joaquín Sabina que dirigirá Fernando León de Aranoa.
La huella del mal es su proyecto más personal. (Biografía extraída de: Planeta de Libros).
Mi reseña:
Ya estoy de vuelta tras el
mes de agosto de vacaciones, y con las pilas cargadas me tenéis otra vez por
aquí para volver a compartir nuevas lecturas. Para la primera reseña he elegido
una novela que disfruté muchísimo y que me tuvo enganchada a sus páginas de
principio a fin. Hoy os cuento mis impresiones sobre La huella del mal de Manuel Ríos San Martín, que nos traslada hasta
las cuevas de Atapuerca, un lugar impresionante que se convertirá en el escenario
de un macabro crimen con una simbología ritual. Agradezco a Editorial Planeta el envío de un
ejemplar para su lectura y reseña.
Cueva de Atapuerca
La
huella del mal nos traslada a Atapuerca, cuando un
estudiante descubre en una de las reproducciones que imitan los enterramientos
prehistóricos el cadáver de una chica que ha sido depositado allí imitando una
simbología ritual. Además, la causa de la muerte y todo lo que la rodea
recuerda a un homicidio ocurrido años atrás en otro yacimiento. Por eso, el
juez decide recurrir a los policías que investigaron ese homicidio, la inspectora
Silvia Guzmán y el expolicía Daniel Velarde, que ahora trabaja en la seguridad
privada. Lo que todo el mundo desconoce es que entre ellos no existe una
relación demasiado buena en la actualidad, tras haber traspasado la barrera de
ser simples compañeros de trabajo en el pasado, y permitir que los sentimientos
interfiriesen en la resolución del caso.
Carex de Atapuerca
Como he comentado al
principio de la reseña, he disfrutado muchísimo con la lectura de La huella del mal. Había leído buenas críticas
en las redes de esta novela de Manuel Ríos San Martín y eso me había hecho
tener mucha predisposición hacia ella, así que cuando recibí el ejemplar os
podéis imaginar la alegría; pero también es cierto que cuando leo muchas
críticas buenas, a veces me creo unas expectativas muy altas respecto al libro
y después me quedo con la sensación de que le ha faltado algo. Este no ha sido
el caso, en esta ocasión las expectativas se han hecho realidad. Estamos ante
una historia que se desarrolla en un escenario original como son las cuevas y
los yacimientos de Atapuerca, se nota que el autor ha realizado un enorme
trabajo de documentación y ha sabido poner esto al servicio de la obra y de la
trama principal de la novela, enriqueciendo enormemente la lectura. Por supuesto
La huella del mal se encuadra dentro
de la novela negra, del thriller, pero además, deja pinceladas, datos y
curiosidades sobre la prehistoria que resultan tremendamente interesantes.
Manuel Ríos San Martín nos sumerge en una historia sobre la venganza, la
obsesión y sobre las consecuencias de los propios actos, pues estos nunca
quedan impunes, sobre todo cuando se realizan sin ningún tipo de remordimiento.
Escrita bajo un estilo
directo, en La huella del mal Manuel
Ríos San Martín utiliza la figura de un narrador externo omnisciente que se
expresa en tercera persona proporcionando toda la información, tanto objetiva
como subjetiva, que afecta a los personajes que aparecen en la novela, y dando
así una visión más global y objetiva de todo lo que ocurre. Desarrollándose la
trama principal en un hilo temporal lineal, encontramos numerosas analepsis o
flashbacks que nos llevan unos años atrás para desarrollar el crimen que tuvo
lugar en otro yacimiento y que Silvia y Daniel tuvieron que investigar, y que
poco a poco iremos descubriendo de qué manera está relacionado con el que ha
tenido lugar en Atapuerca. Con unas muy buenas descripciones, que nos permiten
adentrarnos en cada uno de los escenarios donde transcurre la acción, y unos
diálogos bien desarrollados, encontramos unas escenas con los suficientes
elementos visibles para permitirnos a los lectores entrar de lleno en ellas,
vivirlas junto a los personajes y sentir que estamos presentes en ellas. Ambas
tramas, aunque relacionadas entre sí a través de los personajes, transcurren de
forma paralela e independiente, separadas en el tiempo y en espacio, pero no se
puede entender la que ocurre en el presente sin conocer lo que ocurrió en el
pasado.
Cueva del Sidrón
En cuanto a los personajes,
creo que Manuel Ríos San Martín ha realizado un buen trabajo al perfilar tanto
a los protagonistas como al resto de personajes, pues en La huella del mal encontramos dos claros protagonistas en Silvia y
Daniel, principales encargados de la investigación policial junto a Rodrigo,
actual compañero de Silvia. Rodrigo sería, junto a Inés y Samuel (trabajadora y
director del yacimiento respectivamente) un personaje principal que se descubre
como pieza importante de la trama, y uno de estos tendrá un peso fundamental en
la resolución de los crímenes, pero obviamente no os voy a desvelar cómo ni
quién, poco a poco lo iréis descubriendo según avancéis en la lectura. Personalmente
me han gustado todos los personajes que han ido apareciendo a lo largo de las
páginas de La huella del mal, pues
ninguno me ha parecido irreal o poco creíble; todos se han ido mostrando
humanos, con sus aciertos y sus errores, sus miedos y sus fortalezas, lo que
nos permite a los lectores sentirnos más identificados con ellos.
Trinchera del ferrocarril
La
huella del mal ha sido, sin duda, una de mis lecturas de
este verano y me ha permitido descubrir a Manuel Ríos San Martín, un autor al
que, a partir de ahora, le seguiré la pista, seguro que lo nuevo que nos traiga
valdrá mucho la pena.
Formato: Papel
Sinopsis:
En el pueblo se desata la inquietud. Demasiados detalles recuerdan el caso anterior, por lo que el juez piensa en reunir de nuevo a los policías que se hicieron cargo entonces: Silvia Guzmán, inspectora de la UDEV, y Daniel Velarde, un expolicía dedicado ahora a la seguridad privada. Sin embargo, nadie sabe que en el pasado ambos vivieron una relación sentimental que acabó de manera abrupta y que tuvo mucho que ver en la truncada resolución del caso. Ahora, Silvia y Daniel tendrán que aprender a colaborar y aclarar sus sentimientos para descubrir al asesino del yacimiento y cerrar aquella herida abierta en su pasado. (Sinopsis extraída de: Planeta de Libros).
El autor:
Manuel Ríos San Martín (1965) es licenciado en Ciencias de la Información y ha trabajado en importantes productoras de televisión como Globomedia, BocaBoca y Diagonal, en las que ha ejercido de productor ejecutivo, director o guionista de diversas series y miniseries de televisión. Ha participado, entre otras, en Médico de familia, Menudo es mi padre, Compañeros, Mis adorables vecinos, Soy el solitario, Rescatando a Sara o Sin identidad. Ha coordinado y coescrito el libro El guion para series de televisión y es autor de la novela Círculos.
Actualmente trabaja con la productora BTF, para la que está desarrollando un biopic sobre el cantante Joaquín Sabina que dirigirá Fernando León de Aranoa.
La huella del mal es su proyecto más personal. (Biografía extraída de: Planeta de Libros).
Mi reseña:
Ya estoy de vuelta tras el
mes de agosto de vacaciones, y con las pilas cargadas me tenéis otra vez por
aquí para volver a compartir nuevas lecturas. Para la primera reseña he elegido
una novela que disfruté muchísimo y que me tuvo enganchada a sus páginas de
principio a fin. Hoy os cuento mis impresiones sobre La huella del mal de Manuel Ríos San Martín, que nos traslada hasta
las cuevas de Atapuerca, un lugar impresionante que se convertirá en el escenario
de un macabro crimen con una simbología ritual. Agradezco a Editorial Planeta el envío de un
ejemplar para su lectura y reseña.
Cueva de Atapuerca |
La
huella del mal nos traslada a Atapuerca, cuando un
estudiante descubre en una de las reproducciones que imitan los enterramientos
prehistóricos el cadáver de una chica que ha sido depositado allí imitando una
simbología ritual. Además, la causa de la muerte y todo lo que la rodea
recuerda a un homicidio ocurrido años atrás en otro yacimiento. Por eso, el
juez decide recurrir a los policías que investigaron ese homicidio, la inspectora
Silvia Guzmán y el expolicía Daniel Velarde, que ahora trabaja en la seguridad
privada. Lo que todo el mundo desconoce es que entre ellos no existe una
relación demasiado buena en la actualidad, tras haber traspasado la barrera de
ser simples compañeros de trabajo en el pasado, y permitir que los sentimientos
interfiriesen en la resolución del caso.
Carex de Atapuerca |
Como he comentado al
principio de la reseña, he disfrutado muchísimo con la lectura de La huella del mal. Había leído buenas críticas
en las redes de esta novela de Manuel Ríos San Martín y eso me había hecho
tener mucha predisposición hacia ella, así que cuando recibí el ejemplar os
podéis imaginar la alegría; pero también es cierto que cuando leo muchas
críticas buenas, a veces me creo unas expectativas muy altas respecto al libro
y después me quedo con la sensación de que le ha faltado algo. Este no ha sido
el caso, en esta ocasión las expectativas se han hecho realidad. Estamos ante
una historia que se desarrolla en un escenario original como son las cuevas y
los yacimientos de Atapuerca, se nota que el autor ha realizado un enorme
trabajo de documentación y ha sabido poner esto al servicio de la obra y de la
trama principal de la novela, enriqueciendo enormemente la lectura. Por supuesto
La huella del mal se encuadra dentro
de la novela negra, del thriller, pero además, deja pinceladas, datos y
curiosidades sobre la prehistoria que resultan tremendamente interesantes.
Manuel Ríos San Martín nos sumerge en una historia sobre la venganza, la
obsesión y sobre las consecuencias de los propios actos, pues estos nunca
quedan impunes, sobre todo cuando se realizan sin ningún tipo de remordimiento.
Escrita bajo un estilo
directo, en La huella del mal Manuel
Ríos San Martín utiliza la figura de un narrador externo omnisciente que se
expresa en tercera persona proporcionando toda la información, tanto objetiva
como subjetiva, que afecta a los personajes que aparecen en la novela, y dando
así una visión más global y objetiva de todo lo que ocurre. Desarrollándose la
trama principal en un hilo temporal lineal, encontramos numerosas analepsis o
flashbacks que nos llevan unos años atrás para desarrollar el crimen que tuvo
lugar en otro yacimiento y que Silvia y Daniel tuvieron que investigar, y que
poco a poco iremos descubriendo de qué manera está relacionado con el que ha
tenido lugar en Atapuerca. Con unas muy buenas descripciones, que nos permiten
adentrarnos en cada uno de los escenarios donde transcurre la acción, y unos
diálogos bien desarrollados, encontramos unas escenas con los suficientes
elementos visibles para permitirnos a los lectores entrar de lleno en ellas,
vivirlas junto a los personajes y sentir que estamos presentes en ellas. Ambas
tramas, aunque relacionadas entre sí a través de los personajes, transcurren de
forma paralela e independiente, separadas en el tiempo y en espacio, pero no se
puede entender la que ocurre en el presente sin conocer lo que ocurrió en el
pasado.
Cueva del Sidrón |
En cuanto a los personajes,
creo que Manuel Ríos San Martín ha realizado un buen trabajo al perfilar tanto
a los protagonistas como al resto de personajes, pues en La huella del mal encontramos dos claros protagonistas en Silvia y
Daniel, principales encargados de la investigación policial junto a Rodrigo,
actual compañero de Silvia. Rodrigo sería, junto a Inés y Samuel (trabajadora y
director del yacimiento respectivamente) un personaje principal que se descubre
como pieza importante de la trama, y uno de estos tendrá un peso fundamental en
la resolución de los crímenes, pero obviamente no os voy a desvelar cómo ni
quién, poco a poco lo iréis descubriendo según avancéis en la lectura. Personalmente
me han gustado todos los personajes que han ido apareciendo a lo largo de las
páginas de La huella del mal, pues
ninguno me ha parecido irreal o poco creíble; todos se han ido mostrando
humanos, con sus aciertos y sus errores, sus miedos y sus fortalezas, lo que
nos permite a los lectores sentirnos más identificados con ellos.
Trinchera del ferrocarril |
La
huella del mal ha sido, sin duda, una de mis lecturas de
este verano y me ha permitido descubrir a Manuel Ríos San Martín, un autor al
que, a partir de ahora, le seguiré la pista, seguro que lo nuevo que nos traiga
valdrá mucho la pena.
Yo quería leerlo este verano pero al final se me ha quedado atrás. Me alegra saber que te ha gustado. La verdad es que tiene muy buena pinta. BEsos
ResponderEliminarSi puedes, no lo dejes atrás porque vale la pena darle una oportunidad. Besos!
EliminarEra una de mis lecturas de este verano pero no ha dado tiempo, aún así la sigo teniendo para otoño 😊 veo que te ha gustado y eso me anima.
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
Me ha parecido una gran lectura, la verdad es que se me hizo corta incluso. Seguro que este otoño la disfrutas ;)
EliminarBesos!
Parece que el autor vale la pena darle una oportunidad, pero el tipo de historia no me llama para nada la atención , así que no sabre si lo leeré algún día, pero por el momento paso de el.
ResponderEliminarBesos y abrazos desde Lbros Chidos, me quedo por tu blog.
Si no te gusta la novela negra, supongo que no disfrutarás con este tipo de historia. Gracias por quedarte por aquí.
EliminarBesos!