Reseña Los pequeños incendios.- Ben Pastor
Editorial: Alianza Editorial
Año de edición: 2018
ISBN: 978-84-9104-867-1
Formato: Papel
Sinopsis:
Otoño de 1940, Francia sufre la ocupación del Ejército alemán. Al capitán Martin Bora, de contrainteligencia militar, se le ordena trasladarse primero a París, donde debe contactar con un polaco que tiene importante información oculta de los soviéticos, y luego a Bretaña para seguirle la pista a un oficial alemán que aparentemente está allí estudiando insectos: Ernst Jünger, héroe de la Primera Guerra Mundial y conocido escritor. Bora lo admira, pero el régimen de Hitler desconfía de él.
Su misión se va a complicar cuando es brutalmente asesinada la esposa de un ambicioso contraalmirante alemán, bien relacionado con la cúpula de los servicios de información militar: una mujer bretona, muy religiosa y de familia adinerada, madre de un complejo oficial de la Marina. Bora tendrá que asumir la investigación de un caso que plantea muchas dudas, en un ambiente ambiguo, agitado de pasiones e intereses ocultos de todo tipo. Una investigación salpicada de "pequeños incendios" en la que contará con la ayuda del enigmático Ernst Jünger desde una esquiva y desconfiada amistad.
Un cura expulsado del sacerdocio, nacionalistas bretones, una cantante de cabaret desencantada con la vida, una población bretona menos resistente al invasor de lo que se esperaba, la hostilidad de los SS..., todo envuelto por la misteriosa magia celta, las tradiciones arcanas y las brumas de Bretaña, marcarán las pesquisas de un Martin Bora que de nuevo, buscando algo de humanidad y justicia en medio de los horrores de la guerra, tendrá que enfrentarse a la disyuntiva de cumplir con su deber o no traicionar sus profundas convicciones morales. (Sinopsis extraída de: Alianza Editorial).
La autora:
Es el seudónimo de María Verbena Volpi, que estudió Arqueología en la Universidad La Sapienza de Roma. Marchó a Estados Unidos enseñando en las universidades de Illinois y Ohio, y posteriormente ha sido profesora de Ciencias Sociales en la Universidad de Norwich en Vermont.
Es conocida especialmente por sus novelas de tipo policiaco desarrolladas durante la Segunda Guerra Mundial. (Biografía extraída de: Lecturalia),
Mi reseña:
Sé que es un día poco
habitual para traeros reseña nueva al blog, pero quiero aprovechar estos días
libres para contaros más lecturas que he ido acabando en estas semanas, pues
tengo un montón de novelas sobre las que contaros impresiones. En esta ocasión
os voy a hablar de Los pequeños incendios
de Ben Pastor, novela que llegó a mis manos gracias a Alianza
Editorial, a quienes agradezco el envío de un ejemplar para su lectura y
reseña. Esta vez no he conseguido conectar con la novela, no he logrado entrar
en la historia ni llegar a comprender del todo qué me quería contar la autora;
he tenido la sensación durante toda la lectura de que iba dando tumbos sin un
verdadero sentido, sin seguir un hilo argumental real, como si Ben Pastor fuera
plasmando en el libro las ideas que le fueran viniendo a la cabeza sin tener
claro dónde quería llegar con su novela.
Los
pequeños incendios nos traslada a Francia en 1940. El país está
sufriendo la ocupación nazi y al capitán Bora, de contrainteligencia militar y
recién llegado a la capital, se le ordena trasladarse a Bretaña, donde debe seguir
la pista a Ernst Jünger, un oficial alemán que supuestamente se encuentra en la
zona estudiando insectos. Sin embargo, cuando Bora llegue a un pequeño pueblo de
la zona, todo se complicará al aparecer brutalmente asesinada la esposa de un
contraalmirante alemán. Martin Bora se verá obligado a asumir la investigación
personalmente, que se irá complicando y destapando poco a poco pasiones e
intereses ocultos.
Brest
Como he comentado al
principio de la reseña, no he conectado en ningún momento con este libro, y la
verdad es que es algo que me sabe fatal. Si bien es cierto que esta novela es
la número once de una serie, y que a priori podría parecer una barbaridad
empezar a leer una saga cuando va tan avanzada, lo cierto es que este libro se
puede leer de forma independiente bastante bien, ya que Ben Pastor nos
proporciona los datos suficientes para situarnos en la historia sin perdernos y
poder conocer al protagonista. Lo que me parece imperdonable en cualquier libro
es llegar a la página 150 y que todavía no me haya contado nada, y eso es lo
que me ha ocurrido con Los pequeños incendios;
conforme iba pasando las páginas, me iba preguntado cuando lograría situarme de
verdad en la trama, lograr entender qué me quería contar la autora, cuál era la
verdadera historia que finalmente iba a descubrir. Sin embargo, como os he
dicho, había llegado a la página 150 y no había logrado averiguar ninguna de
estas cosas. Personalmente, creo que esto no se puede pasar por alto en ninguna
novela, pero especialmente en una novela negra, que creo debe presentar la
trama en las primeras veinte (cincuenta cómo mucho) primeras páginas.
Escrito bajo un estilo
directo, en Los pequeños incendios Ben
Pastor opta por dos tipos de figuras narrativas, ya que por una parte
observamos un narrador externo omnisciente que se expresa en tercera persona y
que lleva el mayor peso de la narración, y por otra observamos que también
aparece un narrador interno protagonista en algunos momentos, que se expresa en
primera persona a través de la voz de Martin Bora, quien escribe un diario en
el que plasma algunas de sus vivencias y pensamientos. En Los pequeños incendios he observado un desequilibrio entre las
descripciones, bien realizadas por parte de la autora, y los diálogos, que me
han dado la impresión, en muchas ocasiones, de divagar dentro de la trama,
dando la sensación de que los personajes andaban como perdidos dentro de la
escenas, que en mi opinión, no llegaban a quedar del todo bien resueltas. Es
verdad que conforme se avanza en la novela se nota una mejora en la resolución
de las escenas, pero resulta costoso ese avance. La novela mantiene un hilo
temporal lineal aunque contiene algunos flashbacks que nos proporcionan
información relevante sobre el pasado de los personajes que influye en su
situación presente.
Landerneau
En cuanto a los personajes,
el análisis es bastante paralelo al de estilo. Martin Bora, el protagonista, es
el personaje central de una serie en la que Los pequeños incendios es la novela
número once, pero como he comentado anteriormente, se puede leer bastante bien
de forma independiente, ya que la historia que nos cuenta es autoconclusiva y
Ben Pastor nos proporciona los datos suficientes para poder movernos por la
trama sin necesidad de conocer las historias que la preceden. Bora se nos
presenta como un hombre desconfiado, procedente de una familia de intelectuales
y que no termina de entender muy bien la actitud de muchos de los que le
rodean, aunque en ocasiones también él se conduce de formas un poco
contradictorias. En cuanto a los personajes que le acompañan en Los pequeños incendios, me da la impresión
de que no terminan de estar del todo perfilados, y me hubiera gustado poder ahondar
más en la figura de Ernst Jünger, que termina estableciendo una extraña amistad
con Bora mientras este investiga el asesinato de la esposa del contraalmirante,
pero no llega a mostrarse del todo. Lo que sí me ha gustado es la forma en la
que Ben Pastor mezcla algunos personajes históricos, como el propio Jünger
Rothschild o Canaris, con los personajes ficticios, de manera que la
interactuación entre ellos parece totalmente real.
Ernst Jünger
A pesar de mi experiencia
con Los pequeños incendios, creo que
es justo que, si sois aficionados a este tipo de lecturas, vosotros mismos
decidáis si os apetece darle una oportunidad y conocer de cerca a Martin Bora.
Formato: Papel
Sinopsis:
Su misión se va a complicar cuando es brutalmente asesinada la esposa de un ambicioso contraalmirante alemán, bien relacionado con la cúpula de los servicios de información militar: una mujer bretona, muy religiosa y de familia adinerada, madre de un complejo oficial de la Marina. Bora tendrá que asumir la investigación de un caso que plantea muchas dudas, en un ambiente ambiguo, agitado de pasiones e intereses ocultos de todo tipo. Una investigación salpicada de "pequeños incendios" en la que contará con la ayuda del enigmático Ernst Jünger desde una esquiva y desconfiada amistad.
Un cura expulsado del sacerdocio, nacionalistas bretones, una cantante de cabaret desencantada con la vida, una población bretona menos resistente al invasor de lo que se esperaba, la hostilidad de los SS..., todo envuelto por la misteriosa magia celta, las tradiciones arcanas y las brumas de Bretaña, marcarán las pesquisas de un Martin Bora que de nuevo, buscando algo de humanidad y justicia en medio de los horrores de la guerra, tendrá que enfrentarse a la disyuntiva de cumplir con su deber o no traicionar sus profundas convicciones morales. (Sinopsis extraída de: Alianza Editorial).
La autora:
Es el seudónimo de María Verbena Volpi, que estudió Arqueología en la Universidad La Sapienza de Roma. Marchó a Estados Unidos enseñando en las universidades de Illinois y Ohio, y posteriormente ha sido profesora de Ciencias Sociales en la Universidad de Norwich en Vermont.
Es conocida especialmente por sus novelas de tipo policiaco desarrolladas durante la Segunda Guerra Mundial. (Biografía extraída de: Lecturalia),
Mi reseña:
Sé que es un día poco
habitual para traeros reseña nueva al blog, pero quiero aprovechar estos días
libres para contaros más lecturas que he ido acabando en estas semanas, pues
tengo un montón de novelas sobre las que contaros impresiones. En esta ocasión
os voy a hablar de Los pequeños incendios
de Ben Pastor, novela que llegó a mis manos gracias a Alianza
Editorial, a quienes agradezco el envío de un ejemplar para su lectura y
reseña. Esta vez no he conseguido conectar con la novela, no he logrado entrar
en la historia ni llegar a comprender del todo qué me quería contar la autora;
he tenido la sensación durante toda la lectura de que iba dando tumbos sin un
verdadero sentido, sin seguir un hilo argumental real, como si Ben Pastor fuera
plasmando en el libro las ideas que le fueran viniendo a la cabeza sin tener
claro dónde quería llegar con su novela.
Los
pequeños incendios nos traslada a Francia en 1940. El país está
sufriendo la ocupación nazi y al capitán Bora, de contrainteligencia militar y
recién llegado a la capital, se le ordena trasladarse a Bretaña, donde debe seguir
la pista a Ernst Jünger, un oficial alemán que supuestamente se encuentra en la
zona estudiando insectos. Sin embargo, cuando Bora llegue a un pequeño pueblo de
la zona, todo se complicará al aparecer brutalmente asesinada la esposa de un
contraalmirante alemán. Martin Bora se verá obligado a asumir la investigación
personalmente, que se irá complicando y destapando poco a poco pasiones e
intereses ocultos.
Brest |
Como he comentado al
principio de la reseña, no he conectado en ningún momento con este libro, y la
verdad es que es algo que me sabe fatal. Si bien es cierto que esta novela es
la número once de una serie, y que a priori podría parecer una barbaridad
empezar a leer una saga cuando va tan avanzada, lo cierto es que este libro se
puede leer de forma independiente bastante bien, ya que Ben Pastor nos
proporciona los datos suficientes para situarnos en la historia sin perdernos y
poder conocer al protagonista. Lo que me parece imperdonable en cualquier libro
es llegar a la página 150 y que todavía no me haya contado nada, y eso es lo
que me ha ocurrido con Los pequeños incendios;
conforme iba pasando las páginas, me iba preguntado cuando lograría situarme de
verdad en la trama, lograr entender qué me quería contar la autora, cuál era la
verdadera historia que finalmente iba a descubrir. Sin embargo, como os he
dicho, había llegado a la página 150 y no había logrado averiguar ninguna de
estas cosas. Personalmente, creo que esto no se puede pasar por alto en ninguna
novela, pero especialmente en una novela negra, que creo debe presentar la
trama en las primeras veinte (cincuenta cómo mucho) primeras páginas.
Escrito bajo un estilo
directo, en Los pequeños incendios Ben
Pastor opta por dos tipos de figuras narrativas, ya que por una parte
observamos un narrador externo omnisciente que se expresa en tercera persona y
que lleva el mayor peso de la narración, y por otra observamos que también
aparece un narrador interno protagonista en algunos momentos, que se expresa en
primera persona a través de la voz de Martin Bora, quien escribe un diario en
el que plasma algunas de sus vivencias y pensamientos. En Los pequeños incendios he observado un desequilibrio entre las
descripciones, bien realizadas por parte de la autora, y los diálogos, que me
han dado la impresión, en muchas ocasiones, de divagar dentro de la trama,
dando la sensación de que los personajes andaban como perdidos dentro de la
escenas, que en mi opinión, no llegaban a quedar del todo bien resueltas. Es
verdad que conforme se avanza en la novela se nota una mejora en la resolución
de las escenas, pero resulta costoso ese avance. La novela mantiene un hilo
temporal lineal aunque contiene algunos flashbacks que nos proporcionan
información relevante sobre el pasado de los personajes que influye en su
situación presente.
Landerneau |
En cuanto a los personajes,
el análisis es bastante paralelo al de estilo. Martin Bora, el protagonista, es
el personaje central de una serie en la que Los pequeños incendios es la novela
número once, pero como he comentado anteriormente, se puede leer bastante bien
de forma independiente, ya que la historia que nos cuenta es autoconclusiva y
Ben Pastor nos proporciona los datos suficientes para poder movernos por la
trama sin necesidad de conocer las historias que la preceden. Bora se nos
presenta como un hombre desconfiado, procedente de una familia de intelectuales
y que no termina de entender muy bien la actitud de muchos de los que le
rodean, aunque en ocasiones también él se conduce de formas un poco
contradictorias. En cuanto a los personajes que le acompañan en Los pequeños incendios, me da la impresión
de que no terminan de estar del todo perfilados, y me hubiera gustado poder ahondar
más en la figura de Ernst Jünger, que termina estableciendo una extraña amistad
con Bora mientras este investiga el asesinato de la esposa del contraalmirante,
pero no llega a mostrarse del todo. Lo que sí me ha gustado es la forma en la
que Ben Pastor mezcla algunos personajes históricos, como el propio Jünger
Rothschild o Canaris, con los personajes ficticios, de manera que la
interactuación entre ellos parece totalmente real.
Ernst Jünger |
A pesar de mi experiencia
con Los pequeños incendios, creo que
es justo que, si sois aficionados a este tipo de lecturas, vosotros mismos
decidáis si os apetece darle una oportunidad y conocer de cerca a Martin Bora.
¡Hola guapa!
ResponderEliminarDespués de leerte no tengo ninguna duda, la voy a dejar pasar; además si es parte de una serie con más motivo, soy algo maniática con el orden en las series. No puedo estar más de acuerdo contigo: no pueden pasar 150 páginas sin que te hayan contado nada, no sé cómo has aguantado tanto.
Un beso
No sólo eso, es que me lo leí de cabo a rabo 😂😂😂. Eso sí, compensaba con las otras lecturas que llevaba al tiempo 🤣. Con todo lo que tenemos por leer, hay que ir haciendo criba de títulos.
EliminarUn besote!
Pues me lo has dejado bien claro. Lo dejo pasar que bastante tengo esperando que me llama más.
ResponderEliminarUn beso ,)
Depende de las ganas que le tengas, yo no he conseguido conectar con la historia pero eso no significa que a ti pueda llegar a gustarte :)
EliminarUn beso!
Pues mira que el tema me gusta, la historia me atrae, y en cuanto una novela se me mete entre ceja y ceja...a pesar de tus impresiones, creo que si cae en mis manos le de una oportunidad.
ResponderEliminarBesitos carinyet.
Claro que sí!. Por el hecho de que yo no haya conseguido disfrutarla no significa que a ti no te vaya a encantar. No siempre vamos a coincidir ;).
EliminarBesotes!
Bueno cada libro tiene muchos lectores, quiero decir que a cada uno nos puede gustar o no. No tiene por qué ser una opinión generalizada. En fin, que a mí sí me llama y no me importaría darle una oportunidad. Besos
ResponderEliminarPor supuesto!. Yo siempre digo que cada libro tiene un público y lo que a unos nos gusta a otros no tiene porqué gustarles.
EliminarBesos!