La Oscura Realidad.- Esteban Díaz
Sinopsis:
Durante una noche tormentosa el Contador de Historias, sentado junto al fuego de una hoguera, en el interior de una extraña cabaña, perdida en un tenebroso bosque de hojas muertas que parece sacado de las pesadillas del más desquiciado soñador de historias, narra sus cuentos a todo aquel que llega a la cabaña en busca de refugio.
Primera Noche: LA OSCURA REALIDAD
Los relatos narrados durante la primera noche escarban en lo más profundo del alma humana. Son cuentos de terror y fantasía bajo los que se esconde una realidad oscura, en los que el verdadero mal se encuentra encerrado en el interior de los corazones de los hombres.
Una patina de inquietud, que no nos abandonara ni un momento durante la lectura, se adherirá a nuestro pecho, mientras el juglar errante va desgranando cuento a cuento las miserias y verdades de la naturaleza humana, entremezclándolos con una poderosa imaginación y una fantasía desbordante. Serán relatos crueles, pero provistos de no pocas dosis de ternura, ocultas entre las sombras, como flores bajo una mata de malas hierbas que intentan ahogar su belleza. (Sinopsis extraída de: http://www.amazon.es).
El autor:
Esteban Díaz, nació en Madrid en 1977, escritor de vocación. Especializado en los géneros fantasía y terror, intentando encontrar la vertiente más oscura de la fantasía entremezclada con la realidad. Su relato “La paradoja de la Vieja Muerte” ha sido incluido en el libro Historias del Dragón de Kelonia Editorial. También, la revista Axxon publico su relato “La oscura realidad” en el número dedicado a Los monstruos de 100 autores por 100 palabras. Hasta la fecha, lleva publicadas dos entregas de las "Crónicas del Contador de Historias": "La Oscura Realidad" y "Cuentos de la Vieja Muerte". (Biografía extraída de: http://www.compartelibros.com).
Mi reseña:
Hoy domingo, la entrada también está dedicada a un libro recién terminado; pero en este caso no se trata de una novela, se trata de un libro de relatos; relatos de terror y fantasía que me han sorprendido gratamente: "La Oscura Realidad", de Esteban Díaz, a quien he de agradecer su confianza para realizar una reseña de su obra y facilitarme un ejemplar de la misma.
En "La Oscura Realidad" conocemos al Contador de Historias, que sentado junto al fuego en una tenebrosa cabaña, comparte sus cuentos con todo aquel que, perdido en el tétrico bosque que rodea a la construcción, busca refugio en ella. Todos sus relatos oscuros versarán sobre las miserias del alma humana y la ponzoña que muchas veces esconde el corazón de los hombres, descubriendo sus cuentos a todo aquel que le escucha que el verdadero terror casi siempre adopta forma humana, se esconde entre nosotros y que, aunque desde niños aprendemos a temer a los seres sobrenaturales o a los fantasmas, en realidad, a quien debemos temer es a ese prójimo que, aparentemente no se diferencia en nada de nosotros, escondiendo sus peores instintos bajo una pátina de normalidad e incluso, muchas veces, de falsa bondad.
Lo que más sorprende cuando te enfrentas a la lectura de los relatos que componen "La Oscura Realidad" es que la idea que te podías haber hecho antes de abrir el libro, salta por los aires ya en el primer relato; Esteban Díaz ha construido una amalgama de historias que, además de conseguir mantenerte en tensión durante toda la lectura, hace que te quedes reflexionando sobre lo que subyace en cada una de ellas, el verdadero mensaje, la verdadera maldad que refleja en su escritura: la maldad humana. Tratando temas que van, entre otros, desde la pederastia, a los malos tratos o la pérdida de un ser querido pero entremezclándolos con seres sobrenaturales y mundos de fantasías, a veces más amables y otras no tanto, la lectura de "La Oscura Realidad" se convierte en una montaña rusa de emociones y sobresaltos.
Esteban Díaz opta por un estilo cuidado para la construcción de todos sus relatos, donde se nota la influencia que tienen en él los clásicos de la literatura de terror, utilizando una prosa elaborada. Y es en este punto donde tengo que poner un pequeño "pero" pues he detectado en la narración un exceso de adjetivación, y en muchas ocasiones la anteposición del adjetivo al nombre, dos cosas que en mi opinión recargan la lectura y le restan agilidad; aunque hay veces que los autores creen que esta forma de escritura aporta mayor lirismo, en realidad suelen hacer que la obra resulte menos fácil de seguir. Los relatos de "La Oscura Realidad" se encuentran escritos bajo distintas figuras narrativas, desde la tercera persona de un narrador omnisciente a la primera persona de un narrador protagonista; destacar en este aspecto que también el Contador de Historias, además de intervenir en primera persona al principio de la obra, cuando nos la presente, también irá haciendo intervenciones, siempre hablando a través de su propia voz, en los Interludios, donde nos adelantará o nos hará reflexiones sobre los relatos que leeremos a continuación o sobre los que ya hemos leído, un recurso que me ha parecido realmente original, pues también implica al lector en la historia, dirigiéndose a él como si estuviera presente en esa cabaña. Con un hilo conductor que subyace bajo todos los relatos como es la maldad que se oculta en el alma humana, la ambientación es realmente buena; el autor consigue mantener vivo el interés del lector, dando en algunos de los relatos giros inesperados que sorprenden, y mucho.
En cuanto a los personajes, vemos como en "La Oscura Realidad" son casi siempre los niños los que conservan un alma pura mientras que los adultos, sean perversos o no, tienen ya un alma atormentada. Especial ternura me han causado los personajes protagonistas de los relatos "La Casa", "Títere", o "Desde mi ventana", aunque no por ello son relatos exentos de crueldad. También los personajes protagonistas de "Un corazón de piedra" llegan al alma del lector, aún estando rodeados de un mundo absolutamente cruel. Pero también es cierto que a veces, nos encontraremos con personajes cuya oscuridad, aquello que los atormenta y hace de su vida un infierno no es algo externo a ellos, sino que se encuentra en su interior y dañándoles a ellos mismos. Pero si he de elegir algún relato que me haya tocado la fibra más que los demás, tendría que decir que ese ha sido "El demonio de la lujuria", la historia de Lucia y Alma, esas dos niñas inocentes enfrentadas a un episodio que ningún niño en el mundo debería vivir jamás, y la forma en la que Esteban Díaz lo aborda se me clavó en el alma. En líneas generales, he de decir que, aunque en algunos de los relatos, no llegamos a conocer ni siquiera el nombre de los personajes que los protagonizan, esto no resta un ápice de la empatía que el lector llega a sentir por ellos.
Llegados al final del post, solo puedo expresar desde aquí mi más sincera enhorabuena a Esteban Díaz por haber reunido esta serie de grandes relatos de terror y fantasía que componen "La Oscura Realidad", un libro que recomiendo tanto a los que amamos el género de terror, ya sea desde la novela o el relato, como para aquellos que no sean muy asiduos a esta temática, pues se van a sorprender. Como he dicho antes, no debemos temer a esas criaturas sobrenaturales que desde niños vemos en los cuentos, pues la realidad más oscura se esconde tras los ojos del ser humano, capaz de lo mejor y de lo peor.
Hoy domingo, la entrada también está dedicada a un libro recién terminado; pero en este caso no se trata de una novela, se trata de un libro de relatos; relatos de terror y fantasía que me han sorprendido gratamente: "La Oscura Realidad", de Esteban Díaz, a quien he de agradecer su confianza para realizar una reseña de su obra y facilitarme un ejemplar de la misma.
En "La Oscura Realidad" conocemos al Contador de Historias, que sentado junto al fuego en una tenebrosa cabaña, comparte sus cuentos con todo aquel que, perdido en el tétrico bosque que rodea a la construcción, busca refugio en ella. Todos sus relatos oscuros versarán sobre las miserias del alma humana y la ponzoña que muchas veces esconde el corazón de los hombres, descubriendo sus cuentos a todo aquel que le escucha que el verdadero terror casi siempre adopta forma humana, se esconde entre nosotros y que, aunque desde niños aprendemos a temer a los seres sobrenaturales o a los fantasmas, en realidad, a quien debemos temer es a ese prójimo que, aparentemente no se diferencia en nada de nosotros, escondiendo sus peores instintos bajo una pátina de normalidad e incluso, muchas veces, de falsa bondad.
Lo que más sorprende cuando te enfrentas a la lectura de los relatos que componen "La Oscura Realidad" es que la idea que te podías haber hecho antes de abrir el libro, salta por los aires ya en el primer relato; Esteban Díaz ha construido una amalgama de historias que, además de conseguir mantenerte en tensión durante toda la lectura, hace que te quedes reflexionando sobre lo que subyace en cada una de ellas, el verdadero mensaje, la verdadera maldad que refleja en su escritura: la maldad humana. Tratando temas que van, entre otros, desde la pederastia, a los malos tratos o la pérdida de un ser querido pero entremezclándolos con seres sobrenaturales y mundos de fantasías, a veces más amables y otras no tanto, la lectura de "La Oscura Realidad" se convierte en una montaña rusa de emociones y sobresaltos.
Esteban Díaz opta por un estilo cuidado para la construcción de todos sus relatos, donde se nota la influencia que tienen en él los clásicos de la literatura de terror, utilizando una prosa elaborada. Y es en este punto donde tengo que poner un pequeño "pero" pues he detectado en la narración un exceso de adjetivación, y en muchas ocasiones la anteposición del adjetivo al nombre, dos cosas que en mi opinión recargan la lectura y le restan agilidad; aunque hay veces que los autores creen que esta forma de escritura aporta mayor lirismo, en realidad suelen hacer que la obra resulte menos fácil de seguir. Los relatos de "La Oscura Realidad" se encuentran escritos bajo distintas figuras narrativas, desde la tercera persona de un narrador omnisciente a la primera persona de un narrador protagonista; destacar en este aspecto que también el Contador de Historias, además de intervenir en primera persona al principio de la obra, cuando nos la presente, también irá haciendo intervenciones, siempre hablando a través de su propia voz, en los Interludios, donde nos adelantará o nos hará reflexiones sobre los relatos que leeremos a continuación o sobre los que ya hemos leído, un recurso que me ha parecido realmente original, pues también implica al lector en la historia, dirigiéndose a él como si estuviera presente en esa cabaña. Con un hilo conductor que subyace bajo todos los relatos como es la maldad que se oculta en el alma humana, la ambientación es realmente buena; el autor consigue mantener vivo el interés del lector, dando en algunos de los relatos giros inesperados que sorprenden, y mucho.
En cuanto a los personajes, vemos como en "La Oscura Realidad" son casi siempre los niños los que conservan un alma pura mientras que los adultos, sean perversos o no, tienen ya un alma atormentada. Especial ternura me han causado los personajes protagonistas de los relatos "La Casa", "Títere", o "Desde mi ventana", aunque no por ello son relatos exentos de crueldad. También los personajes protagonistas de "Un corazón de piedra" llegan al alma del lector, aún estando rodeados de un mundo absolutamente cruel. Pero también es cierto que a veces, nos encontraremos con personajes cuya oscuridad, aquello que los atormenta y hace de su vida un infierno no es algo externo a ellos, sino que se encuentra en su interior y dañándoles a ellos mismos. Pero si he de elegir algún relato que me haya tocado la fibra más que los demás, tendría que decir que ese ha sido "El demonio de la lujuria", la historia de Lucia y Alma, esas dos niñas inocentes enfrentadas a un episodio que ningún niño en el mundo debería vivir jamás, y la forma en la que Esteban Díaz lo aborda se me clavó en el alma. En líneas generales, he de decir que, aunque en algunos de los relatos, no llegamos a conocer ni siquiera el nombre de los personajes que los protagonizan, esto no resta un ápice de la empatía que el lector llega a sentir por ellos.
Llegados al final del post, solo puedo expresar desde aquí mi más sincera enhorabuena a Esteban Díaz por haber reunido esta serie de grandes relatos de terror y fantasía que componen "La Oscura Realidad", un libro que recomiendo tanto a los que amamos el género de terror, ya sea desde la novela o el relato, como para aquellos que no sean muy asiduos a esta temática, pues se van a sorprender. Como he dicho antes, no debemos temer a esas criaturas sobrenaturales que desde niños vemos en los cuentos, pues la realidad más oscura se esconde tras los ojos del ser humano, capaz de lo mejor y de lo peor.
Inquietante proposición. Parece muy interesante. la maldad humana como eje, porque comparados con los seres humanos, los fantasmas más terribles no tienen nada que hacer.
ResponderEliminarA mi me sorprendido mucho y para bien. Son relatos inquietantes y al tiempo que dejan al lector con profundas reflexiones.
EliminarUn saludo!!
Sólo puedo decir GRACIAS, Inma. Me alegro mucho que te haya sorprendido e inquietado. Me ha encantado la reseña y las imágenes que has puesto para acompañarla. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarDe nada Esteban!!. Ha sido un placer.
EliminarUn abrazo!