Reseña Retrato en sangre.- John Katzenbach
Sinopsis:
Miami, Nueva Orleans, Kansas City, Omaha, Chicago, Cleveland. Un hombre, una mujer, un coche, una cámara fotográfica. No es un viaje normal por carretera, pues él se dedica a secuestrar, matar y, después, fotografiar a sus víctimas; ella, a escribir sobre lo ocurrido y asegurarse de que ha plasmado correctamente la historia, porque sabe que luego su captor lo revisará todo. La detective Mercedes Barren, de la policía de Miami, tiene motivos de sobra para perseguir a ese psicópata desconocido: su sobrina es una de sus presuntas víctimas. También el psiquiatra Martin Jeffers, especialista en delitos sexuales, está interesado en el caso. El primer sospechoso que encuentran es un fundamentalista islámico, pero pronto descubren que el asunto es más complicado de lo que creían, y que ese islamista nada tiene que ver con el secuestro de la joven.
El autor:
John Katzenbach es un escritor y periodista especializado en temas judiciales, nacido en 1950 en Estados Unidos, hijo de un reconocido político en activo durante la "era Kennedy". También ha colaborado como guionista para las adaptaciones cinematográficas que se han realizado de sus obras. Nominado en dos ocasiones al Premio Edgar por sus novelas "Al calor del verano" y "La Sombra", es autor de numerosos best- sellers como "La Historia del Loco", "Juicio Final", o "El Psicoanalista". Sus títulos más recientes publicados en España son "El profesor" (2010), "Un final perfecto" (2012) y "El estudiante" (2014). (Biografía extraída de: http://es.wikipedia.org).
Mi reseña:
Hoy sábado, os traigo acción e intriga al blog con la reseña de otra novela de John Katzenbach, en esta ocasión "Retrato en sangre", una buena novela negra, aunque hay que reconocer que en algunos puntos, irregular.
En "Retrato en sangre", la detective de homicidios de Miami Mercedes Barren tiene entre manos la investigación de una serie de asesinatos, todos ellos cometidos sobre mujeres jóvenes; pero esta no es una investigación más: una de las víctimas es su sobrina. Y aunque en un principio todo apunta hacia un sospechoso que ya tienen bajo custodia, el instinto de la detective Barren le dice que el monstruo todavía está suelto. Pero no sólo ella sabe que el asesino todavía está libre, también el psiquiatra Martin Jeffers, especialista en delitos sexuales, se mete de lleno en la investigación del caso, acompañando a Barren en un viaje donde las normas no tienen cabida. Mientras, un hombre recorre en coche el país acompañado de una joven universitaria, un viaje que va dejando una estela de sangre allá por donde pasa, y del cual el asesino necesita dejar constancia fotográfica así como una crónica, una especie de "diario de viaje" que Anne Hampton, secuestrada por el asesino, será la encargada de redactar; y Anne sabe que su propia vida depende de que esta crónica sea tal y como el asesino quiere que sea.
En esta novela, John Katzenbach nos introduce en una historia con un argumento que parte de una perspectiva distinta, ya que prácticamente desde el principio los lectores conoceremos la identidad del asesino, y con ello, iremos conociendo sus pensamientos, la inquietante personalidad de un psicópata que se ha dedicado a perfeccionar su método criminal a lo largo de los años. Iremos desgranando a los personajes que persiguen al tiempo que desgranamos a los que son perseguidos. Una temática, la de los asesinos en serie, narcisistas y que se creen por encima del bien y del mal que cada día tenemos más presente en la sociedad occidental. No sabemos si es por el ritmo o el estilo de vida, pero existe una progresiva "despersonalización" hacia una mayor "cosificación" dando más importancia a lo que se posee, a lo material, que a quien tenemos al lado, a los que nos rodean; pero lo cierto, y quizás todavía más inquietante es la imposibilidad de identificarles dentro de la sociedad hasta que no dan rienda suelta a sus instintos y desatan el terror, y aún así, resulta tremendamente complejo dar con ellos, pues son capaces de mimetizarse por completo con el resto y aparentar ser ciudadanos completamente normales.
"Retrato en sangre" es una novela escrita con un ritmo algo irregular, pues en algunos momentos de la lectura es rápida e incluso frenética, mientras que en otros pasa a ser más lenta, introspectiva y esto puede causar un poco de desconcierto al lector ya que en mi opinión, la transición entre los ritmos no termina de estar bien encajada, sino que resulta algo cortante y forzada. La prosa utiliza por John Katzenbach es ágil y directa; un libro donde los diálogos son numerosos, pero no excesivos, pero donde sí que encontramos que el autor ha recurrido en bastantes ocasiones al monólogo interior de los personajes,mediante un estilo libre indirecto, lo que permite que el personaje introduzca sus pensamientos en el discurso del narrador; un narrador omnisciente, conocedor de todo lo que sucede en la novela, tanto en lo referente a la trama como sobre aquello que afecta exterior e interiormente a los personajes, y que traslada toda esta información al lector. Nos enfrentamos a una lectura con una trama bien construida, donde tres hilos argumentales se entremezclan entre sí. Por una parte vemos la persecución que realizan Mercedes Barren y Martin Jeffers, que intentan cercar al asesino, y será en algunos de estos capítulos donde John Katzenbach introduzca las "sesiones con los niños perdidos", sesiones de terapia de grupo con asesinos en serie de Martin Jeffers, que más tarde se revelarán como fundamentales para la resolución del caso; por otra conoceremos cada uno de los pasos que irá dando el psicópata acompañado de Anne Hampton, asistiendo a cada uno de los crímenes que va cometiendo. Sin embargo, se trata de una novela que pese a tener altibajos, se puede considerar una buena novela pero con un mal final, y no porque acabe mal, sino porque se precipita tanto y se resuelve en tan pocas páginas, que da la sensación de que el autor tenía ganas de apagar el ordenador y decir "acabé", y es una lástima porque los malos finales pueden arruinar toda una buena lectura.
En cuanto a los personajes, John Katzenbach suele salir airoso en este campo, pues suele plasmar y dibujar de forma muy correcta a los personajes que aparecen en sus novelas. En este caso, "Retrato en sangre" también aprueba con nota, aunque he de reconocer que en cuanto a desarrollo, salen mejor parados las figuras del psicópata y de Anne Hampton, con unas personalidades mucho más complejas, más trabajadas y que llegan, en algunos puntos a resultar fascinantes. Sin embargo, en este punto, se puede decir que el personaje que menos logrado está es el de Mercedes Barren, quien pese a estar correctamente dibujada dentro de la trama, resulta más plana, desde el principio conoces cuales son los sentimientos que la guían y no hay nada que la mueva de su objetivo, pero sin embargo, tiene una frialdad que no deja de resultar palpable a lo largo de toda la lectura, algo que entra en contradicción con el fin que la mueve a actuar como lo hace. Por otra parte, también es interesante la personalidad desarrollada por el doctor Martin Jeffers, un hombre que esconde grandes contradicciones, que en realidad se encuentra en un punto intermedio entre ambas tramas, la lógica y el sentido del deber y la justicia le unen a la detective, otro tipo de sentimientos le hacen identificarse con la figura del psicópata, y esa dicotomía en un mismo personaje hacen que este se convierta, dentro de la novela, en el que representa las dos caras de una misma moneda.
"Retrato en sangre" es una novela negra que entretiene, y mucho. No está al mismo nivel que "El psicoanalista" (cuya reseña podéis leer aquí) pero para los que somos aficionados al género, nos mantendrá pegados a sus páginas.
El autor:
John Katzenbach es un escritor y periodista especializado en temas judiciales, nacido en 1950 en Estados Unidos, hijo de un reconocido político en activo durante la "era Kennedy". También ha colaborado como guionista para las adaptaciones cinematográficas que se han realizado de sus obras. Nominado en dos ocasiones al Premio Edgar por sus novelas "Al calor del verano" y "La Sombra", es autor de numerosos best- sellers como "La Historia del Loco", "Juicio Final", o "El Psicoanalista". Sus títulos más recientes publicados en España son "El profesor" (2010), "Un final perfecto" (2012) y "El estudiante" (2014). (Biografía extraída de: http://es.wikipedia.org).
Mi reseña:
Hoy sábado, os traigo acción e intriga al blog con la reseña de otra novela de John Katzenbach, en esta ocasión "Retrato en sangre", una buena novela negra, aunque hay que reconocer que en algunos puntos, irregular.
En "Retrato en sangre", la detective de homicidios de Miami Mercedes Barren tiene entre manos la investigación de una serie de asesinatos, todos ellos cometidos sobre mujeres jóvenes; pero esta no es una investigación más: una de las víctimas es su sobrina. Y aunque en un principio todo apunta hacia un sospechoso que ya tienen bajo custodia, el instinto de la detective Barren le dice que el monstruo todavía está suelto. Pero no sólo ella sabe que el asesino todavía está libre, también el psiquiatra Martin Jeffers, especialista en delitos sexuales, se mete de lleno en la investigación del caso, acompañando a Barren en un viaje donde las normas no tienen cabida. Mientras, un hombre recorre en coche el país acompañado de una joven universitaria, un viaje que va dejando una estela de sangre allá por donde pasa, y del cual el asesino necesita dejar constancia fotográfica así como una crónica, una especie de "diario de viaje" que Anne Hampton, secuestrada por el asesino, será la encargada de redactar; y Anne sabe que su propia vida depende de que esta crónica sea tal y como el asesino quiere que sea.
En esta novela, John Katzenbach nos introduce en una historia con un argumento que parte de una perspectiva distinta, ya que prácticamente desde el principio los lectores conoceremos la identidad del asesino, y con ello, iremos conociendo sus pensamientos, la inquietante personalidad de un psicópata que se ha dedicado a perfeccionar su método criminal a lo largo de los años. Iremos desgranando a los personajes que persiguen al tiempo que desgranamos a los que son perseguidos. Una temática, la de los asesinos en serie, narcisistas y que se creen por encima del bien y del mal que cada día tenemos más presente en la sociedad occidental. No sabemos si es por el ritmo o el estilo de vida, pero existe una progresiva "despersonalización" hacia una mayor "cosificación" dando más importancia a lo que se posee, a lo material, que a quien tenemos al lado, a los que nos rodean; pero lo cierto, y quizás todavía más inquietante es la imposibilidad de identificarles dentro de la sociedad hasta que no dan rienda suelta a sus instintos y desatan el terror, y aún así, resulta tremendamente complejo dar con ellos, pues son capaces de mimetizarse por completo con el resto y aparentar ser ciudadanos completamente normales.
"Retrato en sangre" es una novela escrita con un ritmo algo irregular, pues en algunos momentos de la lectura es rápida e incluso frenética, mientras que en otros pasa a ser más lenta, introspectiva y esto puede causar un poco de desconcierto al lector ya que en mi opinión, la transición entre los ritmos no termina de estar bien encajada, sino que resulta algo cortante y forzada. La prosa utiliza por John Katzenbach es ágil y directa; un libro donde los diálogos son numerosos, pero no excesivos, pero donde sí que encontramos que el autor ha recurrido en bastantes ocasiones al monólogo interior de los personajes,mediante un estilo libre indirecto, lo que permite que el personaje introduzca sus pensamientos en el discurso del narrador; un narrador omnisciente, conocedor de todo lo que sucede en la novela, tanto en lo referente a la trama como sobre aquello que afecta exterior e interiormente a los personajes, y que traslada toda esta información al lector. Nos enfrentamos a una lectura con una trama bien construida, donde tres hilos argumentales se entremezclan entre sí. Por una parte vemos la persecución que realizan Mercedes Barren y Martin Jeffers, que intentan cercar al asesino, y será en algunos de estos capítulos donde John Katzenbach introduzca las "sesiones con los niños perdidos", sesiones de terapia de grupo con asesinos en serie de Martin Jeffers, que más tarde se revelarán como fundamentales para la resolución del caso; por otra conoceremos cada uno de los pasos que irá dando el psicópata acompañado de Anne Hampton, asistiendo a cada uno de los crímenes que va cometiendo. Sin embargo, se trata de una novela que pese a tener altibajos, se puede considerar una buena novela pero con un mal final, y no porque acabe mal, sino porque se precipita tanto y se resuelve en tan pocas páginas, que da la sensación de que el autor tenía ganas de apagar el ordenador y decir "acabé", y es una lástima porque los malos finales pueden arruinar toda una buena lectura.
Pabellón Z Pontificia Universidad Católica del Perú- Panoramio ©Emilio Salcedo |
"Retrato en sangre" es una novela negra que entretiene, y mucho. No está al mismo nivel que "El psicoanalista" (cuya reseña podéis leer aquí) pero para los que somos aficionados al género, nos mantendrá pegados a sus páginas.
Como el psicoanalista ninguna. Eso está claro. Pero bueno, a esta le daré una oportunidad.
ResponderEliminarBesos!
Estoy de acuerdo contigo!!, pero esta esp entretenida y te pasas un buen rato de lectura!.
EliminarBesos!!
Es que el psicoanalista es.... digamos que dificil de superar....
EliminarQuién es el asecino me pueden decir
ResponderEliminarMe decepcionó. Nada que ver con el ritmo y narrativa de "El psicoanalista" . Por ejemplo, se extiende innecesariamente en describir con minuciosidad casi morbosa la noche terrorífica en qué Anne es sometida por el psicóoata. Diáligos interminables entre delincuentes sexuales. Tuve que abandonarla porque me aburrió. Lo lamento, porque me ilusionaba retomar Katzenbach.
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