La dama número trece.- José Carlos Somoza

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Reseña La dama número trece.- José Carlos Somoza

Sinopsis:

Salomón Rulfo, profesor de literatura en paro y gran amante de la poesía, sufre noche tras noche una inquietante y aterradora pesadilla. En sus sueños aparece una casa desconocida, personas extrañas y un triple asesinato sangriento, en el que, además, una mujer le pide ayuda desesperadamente. Por este motivo, Salomón acude a la consulta del doctor Ballesteros, un médico que le ayuda a desentrañar el misterio de los sueños y le acompaña en lo que se convertirá en un caso mucho más terrible y escalofriante que cualquier fantasía: el escenario del crimen es real y la mujer que pide socorro a gritos fue realmente asesinada.En compañía de una joven de pasado enigmático, el doctor y un ex profesor de la universidad con el que mantiene una relación compleja, Salomón se adentrará en un mundo donde las palabras y la poesía son un arma de gran poder. En ese mundo, habitan las doce damas que controlan nuestro destino desde las sombras...o ¿Son trece brujas?. 

El autor:

José Carlos Somoza Ortega (La Habana, Cuba, 13 de noviembre de 1959) es un escritor español. Se trasladó a España con sus padres a la edad de un año, país donde reside desde entonces. Ha estudiado medicina, especializándose en la rama de la psiquiatría, y no es hasta 1994 cuando empieza a dedicarse de forma plena a la literatura. Es socio de honor de Nocte, la Asociación Española de Escritores de Terror. Ha sido galardonado con numerosos premios literarios a lo largo de su carrera, como por ejemplo: El Fernando Lara 2001 y El Hammett 2002 por "Clara y la penumbra" o el Ciudad de Torrevieja 2007 por "La llave del abismo". Su última novela "La cuarta señal" ha sido publicada en 2014 por la editorial Minotauro. (Biografía extraída de: http://es.wikipedia.org).

Mi reseña:

La reseña de hoy es para la que es mi obra favorita, hasta la fecha, de todas las que he leído de José Carlos Somoza, La dama número trece (y eso que "Clara y la penumbra" está muy muy cerca); pero con esta novela disfruté y me enganché tanto que se convirtió en una verdadera adicción hasta que la acabé. Una mezcla de fantasía, terror y "universo Somoza" a la que a mi me resultó imposible resistirme. 

La dama número trece nos sumerge en la vida de Salomón Rulfo, un profesor de literatura que no está pasando por su mejor momento profesional, y que lleva un tiempo sufriendo una pesadilla recurrente en la que es testigo de un triple asesinato en una casa que desconoce y rodeado de personas que le son totalmente ajenas, y en la que además una mujer que tampoco conoce le pide ayuda desesperadamente. Desesperado, acude a la consulta del doctor Ballesteros para intentar solucionar su problema; pero lo que en un principio será una terapia, se convertirá en algo que llegará mucho más lejos, ya que el descubrimiento de que la casa de las pesadillas es real y que en ella se cometió un triple asesinato unos meses atrás llevará a Salomón y al doctor Ballesteros a investigar que se esconde tras esos muros y qué lo conecta con Salomón. Entonces entrará en escena Raquel, una joven que también viene sufriendo la misma pesadilla que Salomón, y se unirá a ellos en una investigación que arrojará a la luz un mundo donde la poesía, la fuerza de la palabra y unas extrañas damas que controlan el destino están peligrosamente relacionadas con los acontecimientos de sus pesadillas. 

La dama número trece vuelve a llevarnos al mundo de José Carlos Somoza, que como ya comenté en la reseña realizada sobre "Clara y la penumbra" (que podéis leer aquí) es un escritor realmente personal; tiene un estilo propio y es capaz de crear mundos propios de una manera tal que el lector se sumerja en ellos llegando a dudar de su propia realidad. Quizá La dama número trece se mueve más dentro de lo que es la fantasía y el terror ("Clara y la penumbra" entraba dentro de la novela negra), ya que Somoza es un escritor que parece moverse de forma cómoda en varios géneros. Desde luego, en esta novela consigue crear un ambiente realmente opresivo y al mismo tiempo mágico mezclando lo sobrenatural con escenas que pueden revolver algún estómago sensible e incluso dotando a alguno de sus personajes de cierto aire mitológico. Y para dar otra vuelta de tuerca, lo que realmente tiene el poder en esta novela es la palabra, la poesía, ya que encontramos versos de obras como La Eneida (Virgilio), La Divina Comedia (Dante), versos de William Blake o Dámaso Alonso escritos en forma de filacterias o sobre otros medios y que se utilizarán como herramienta para hacer el bien o el mal. 

Dido y Eneas (La Eneida, Virgilio)

Escrita con el estilo personal de José Carlos Somoza, es capaz de utilizar un lenguaje casi etéreo y poético en un momento de su narración para al siguiente pasar a narrarte una escena de forma tan directa y brutal que es como recibir un derechazo, pero eso hace que la lectura sea tan intensa y cause tanta incertidumbre que resulte imposible dejar de leer. Con unas descripciones que consiguen que el lector se adentre dentro de cada uno de los escenarios de la novela (y muchas veces lo que querrá será salir) creando una atmósfera gótica y siniestra que nos envuelve mientras estamos leyendo; en esta obra José Carlos Somoza también recurre mucho al diálogo para darle esa fuerza a la palabra dentro del libro. Y esta combinación de diálogos y descripciones (ambos elementos potentes) crean un clima de suspense y opresión realmente genial. 

En cuanto a los personajes, también muy bien elaborados por parte del autor, resultan complejos, atormentados en ocasiones y con vidas paralelas y una trastienda que procuran mantener oculta, no siempre serán lo que parecen. El personaje de Salomón es el de un hombre atormentado, que no pasa por su mejor momento personal ni profesional, y a medida  que avance la novela tendrá que enfrentarse a sus propios miedos e incluso a sí mismo. Pero si hay un personaje revelación en el libro es el Raquel, la joven que sufre la misma pesadilla que Salomón y que parece conectada con él de alguna misteriosa manera. Con muchos secretos que guardar, la evolución de este personaje a lo largo de la novela resultará tremendo, hasta llegar a un punto en el que su presencia es fundamental para desentrañar todo el misterio generado alrededor de los crímenes cometidos en esa casa desconocida. Tampoco se puede obviar que la presencia de "las damas" resulta imprescindible, sin ellas no habría novela, aunque no sean personajes principales; son la otra cara, el mal, pero revestidas de un halo de mitología, brujería y horror. 

La dama número trece es una novela donde José Carlos Somoza se adentra, con su estilo particular, dentro del mundo del terror gótico, de lo sobrenatural, pero dándole ese toque de fantasía y al mismo tiempo de gran belleza al dotar de la fuerza suprema a la palabra a través de la poesía, siendo ésta la única capaz de hacer que la balanza se incline hacia el bien o hacia el mal. Un libro que resulta imposible deje indiferente al lector donde te encuentras escenas con descripciones propias de la mejor novela gótica entremezclada con algunas que literalmente, te podrán los pelos de punta y que mantendrás en tu mente largo tiempo.